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Salud
¡Pequeños gestos que transforman vidas!DGM integrada al programa «Tapitas por Quimio»
#LaHoraInformativa
SANTO DOMINGO.- La Dirección General de Migración (DGM) entregó miles de tapitas plásticas recolectadas por sus colaboradores en apoyo a la campaña «#TapitasPorQuimio, para favorecer a niños, niñas y adolescentes con Cáncer.
Gracias al impulso de la Sra. Patricia Núñez de Lee, esposa del director general de Migración, vicealmirante Luis Rafael Lee Ballester, ARD, y el apoyo de la Dirección de Recursos Humanos de la institución, encabezada por la coronel Belkis Asiático Almonte, PN, esta iniciativa movilizó a todo el personal de Migración desde sus diferentes áreas, demostrando que la solidaridad sí cambia vidas.
Estas tapitas ahora serán recicladas por las empresas, las que contribuirán al financiamiento de diagnósticos, tratamientos y medicamentos, a través de fundaciones especializadas que destinarán estos fondos con la debida transparencia en beneficio de los niños.
Además de ayudar a pacientes pediátricos, con esta causa también se contribuye con el cuidado del medio ambiente.
La entrega se realizó en la sede de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo, centro de acopio oficial.
DIRECCIÓN DE COMUNICACIONES
17 DE OCTUBRE DE 2025.-
Economía
🍊 De Loma de Cabrera a París: El aroma dominicano que conquista el mundo.
#LaHoraDeLosNegocios
En cada gota de Grand Marnier, ese licor francés que evoca elegancia y tradición, hay una historia que comienza en los campos de Dajabón. Lo que muchos no saben es que detrás de su inconfundible sabor hay manos dominicanas, tierra fértil y un compromiso comunitario que trasciende fronteras.
Cuando la producción de naranjas amargas cayó en Haití, la Casa Marnier-Lapostolle buscó nuevos horizontes. Y los encontró en Loma de Cabrera y Restauración, donde más de 130 productores, organizados por la Asociación de Productores de Esencias y Rurales (APER), cultivan con esmero las naranjas que hoy viajan a Francia.
Allí, la cáscara se transforma en esencia. Se mezcla con coñac, se destila con precisión, y se embotella como uno de los licores más reconocidos del planeta. Pero el corazón de ese aroma sigue siendo dominicano.
Este logro no solo representa una alianza comercial: es un símbolo de cómo el talento rural, la organización comunitaria y la calidad de nuestra tierra pueden insertarse en cadenas globales de valor. Es también una invitación a mirar el campo con nuevos ojos, reconociendo su potencial como motor de desarrollo, identidad y orgullo nacional.
Cada botella de Grand Marnier que se sirve en un restaurante de lujo o se regala en una celebración lleva consigo el eco de nuestras montañas, el esfuerzo de nuestras familias y el sabor de nuestra historia.
